Entrar a una empresa nueva puede ser un reto para el colaborador y afectar la productividad de la empresa, pero es posible optimizar el proceso de entrada y
adaptación de los nuevos empleados a través del onboarding. Descubre cómo hacerlo.
La
inducción del personal siempre es un reto para las organizaciones que buscan que sus colaboradores se adapten desde el primer día a su nuevo sitio de trabajo. El
proceso de inducción es necesario para que el empleado se familiarice con el ambiente labora. La forma de hacerlo es a través de un
proceso de Onboarding.
¿Qué es el proceso de Onboarding en las empresa?
El
onboarding para las empresas es un proceso por el cual se da la incorporación de nuevos trabajadores a una organización. En dicho procedimiento un nuevo colaborador tiene la oportunidad de conocer cómo es la organización, su rol dentro de la empresa, sus nuevos compañeros y la filosofía de la empresa.
Es a partir de esta situación que se desarrolla el
concepto de onboarding, estrategia que busca facilitar la llegada y acompañar al nuevo empleado en la última fase del proceso de contratación, así como en la fase de inducción y transición.
El proceso de inducción es importante para una organización porque disminuye las dudas de los nuevos empleados y facilita el aprendizaje de las nuevas funciones y tecnologías a implementar.
¿Qué es el Onboarding?
El onboarding es una practica que busca acelerar el proceso de inducción en una empresa. Por lo tanto, el objetivo es lograr que en la inducción de personal los colaboradores se adentren 100 % a la cultura empresarial.
¿Cómo hacer un proceso de Onboarding efectivo?
Para Ruddy Valcárcel,
experta en onboarding y recursos humanos, indica que
el proceso de inducción es importante para una organización porque este “comienza cuando se selecciona a una persona y va hasta máximo 90 días después de su llegada al nuevo cargo. Lo que busca es facilitar su adaptación estable para los siguientes meses”.
Durante el
periodo de onboarding, “la persona cuenta con un
acompañamiento constante para familiarizarse con la cultura y el clima laboral. Por eso, es necesario dejar claras las expectativas tanto del colaborador como de la organización desde el principio y mantener un seguimiento sobre estas expectativas y su cumplimiento”.
Un proceso de inducción se destaca por ser estratégico en la intregración de los nuevos colaboradores. Este debe trazar un plan en el que se tenga claro la agenda del día, la cual se tiene que enviar al correo del nuevo integrante. Se debe presentar las políticas corporativas, el plan de formación, los objetivos a cumplir, entre otros aspectos.
Ejemplos de onboarding en empresas
Compensar cuenta con la Universidad Corporativa, que busca
facilitar el proceso de adaptación de todos los empleados de la Caja. Johana Alfonso, coordinadora de este programa, explica que “
se busca acompañar al empleado desde su primer momento, incluso desde el proceso de selección, para generar experiencias de aprendizaje, pensadas para que el nuevo colaborador se ponga a tono con la cultura organizacional”.
¿Cómo da seguimiento el proceso de inducción de Compensar?
Compensar aplica el onboarding a través de diferentes dinámicas. Entre ellas se encuentra “un proceso de inducción de 16 horas en el que el colaborador se familiariza con los principios de la Caja, así como el comportamiento que la organización espera de él. Esto se hace a través de aprendizaje experiencial y de elementos de juego”.
Johana Alfonso también asegura que uno de los
objetivos principales del onboarding es “que el empleado entienda cómo es la empresa, qué hace, por qué lo hace y cómo sus funciones le aportan a este objetivo empresarial. Para esto, el colaborador requiere de asesoría, explicaciones y acompañamiento por parte de su jefe”.
Pero esta práctica tiene que hacerse con seriedad, pues en muchas ocasiones, las organizaciones terminan haciendo menos por querer hacer más. Johanna Alfonso asegura que uno de los
errores más comunes al realizar el onboarding es que “ las empresas, en su afán de enamorar a los colaboradores, extienden demasiado el proceso de inducción. Esto satura al colaborador y hace que no se lleve demasiada información”.
Proceso de inducción en la nueva normalidad
La crisis mundial generada por el Covid-19 marca un nuevo panorama para el procesos de inducción y el departamento de recursos humanos juega un papel fundamental. De hecho, son ellos quienes tiene que estar en constante comunicación con el nuevo colaborador para disminuir sus dudas y hacerlo sentir más cómodo.
Días antes de su llegada, lo ideal es que el colaborador reciba todo el equipo tecnológico para realizar sus actividades. De igual manera, diseñar una agenda en la que se organicen sesiones para que el colaborador conozca a su nuevo equipo de trabajo y designar un mentor que guíe su proceso.
De esta manera,
Es posible mejorar la adaptación de sus colaboradores a su empresa implementando el onboarding. No importa si su empresa es pequeña, mediana o grande. Lo que debe buscar es el desarrollo de un proceso único que realmente empape a sus colaboradores con la cultura organizacional y la identidad corporativa.