Conoce la historia de Luis Alberto, diagnosticado con párkinson, quien encontró en Compensar, una rutina de bienestar y una nueva razón para vivir con alegría. ¡Inspírate con su testimonio!
La vida sigue: la historia de Luis Alberto, ejemplo de superación y bienestar
A los 54 años, Luis Alberto Jiménez recibió un diagnóstico que le cambiaría la vida: párkinson. Pero lejos de detenerse, decidió hacerle frente con determinación y un propósito claro: vivir cada día con alegría. Hoy, con 66 años, este esposo, padre y abuelo es un testimonio vivo de cómo el bienestar integral y el acompañamiento adecuado pueden transformar una vida.
“La vida tiene que seguir, a pesar del diagnóstico. Llámese párkinson o llámese la enfermedad que sea.”
Así lo afirma con una sonrisa Luis Alberto, conocido con cariño como “Lucho” por quienes lo rodean en el Centro de Bienestar Integral de Compensar en la Carrera 60, lugar al que llegó desde el primer día de apertura y que desde entonces se ha convertido, según él, en su segundo hogar: “paso más tiempo en Compensar que en mi casa”, dice entre risas.
Mucho más que una sede: un verdadero hogar para el adulto mayor
El Centro Urbano de Recreación (C.U.R.) de Compensar es un espacio pensado para brindar bienestar físico, mental y emocional a personas de todas las edades, pero especialmente a los adultos mayores.
Este complejo ofrece múltiples servicios como:
- Piscinas olímpicas y recreativas.
- Gimnasio y clases grupales.
- Salas de estimulación sensorial únicas en su tipo.
- Biblioteca
- Programas de ocupación como cocina, música, lectura y actividades cognitivas.
- Acompañamiento profesional y espacios para el encuentro social.
Además de realizar actividad física todos los días, Luis Alberto ha descubierto nuevas pasiones en la música y la cocina, que le han ayudado a trabajar su motricidad fina y mantener su autonomía.
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La fórmula de las 4F con la que Lucho ha logrado vivir a plenitud
Con sabiduría y sencillez, Luis Alberto comparte lo que él llama la teoría de las 4F, su guía personal para vivir mejor:
- Fe. Porque siempre hay un ser superior que guía el camino.
- Fortaleza física. Cultivada con ejercicio diario.
- Fortaleza mental. Alimentada con actitud positiva.
- Felicidad. La que crea esperanza y lo más valioso, la que toma sentido en cada espacio de Compensar.
Esta filosofía no solo ha transformado su vida, sino que ha inspirado a su familia. Cuando le preguntaron a su nieta qué quería ser cuando fuera grande, respondió con ternura e inocencia: “Pensionada como mi abuelito, que no trabaja, pero disfruta haciendo otras cosas.”
Una historia que inspira
Luis Alberto es una prueba viva de que, con voluntad, apoyo y el entorno adecuado, es posible transformar la adversidad en oportunidad. Cada día que asiste al CUR, cada actividad que realiza con alegría, es una muestra de su convicción: “Si quieres vivir, tienes que trabajar para vivir. Y ahora lo que hago es disfrutar la vida, gozarme cada minuto, cada momento, cada actividad.”
Te invitamos a conocer esta historia completa y descubrir cómo Compensar sigue cambiando vidas a través del bienestar integral.
¡Dale play y conoce su historia!