En árabe, hummus significa garbanzo y cuando se habla de “ḥummuṣ bi ṭaḥīna”, se refiere a uno de los platos más populares del Medio oriente, un puré de garbanzo que conquista occidente. A continuación, descubre cómo hacer hummus cremoso y comienza a sumergirte en la gastronomía árabe.
Beneficios del hummus
El hummus, como se le conoce internacionalmente a la forma abreviada del ḥummuṣ bi ṭaḥīna, se compone principalmente de garbanzo, una legumbre que contiene vitamina K, hierro, fosfato, calcio, magnesio, manganeso, zinc, esto hace que sea un alimento con alto contenido en fibra y rico en grasas insaturadas.
Por lo que incluir este alimento en tu dieta favorece a:
- Prevenir o combatir el estreñimiento.
- Disminuir el colesterol
- Controlar la glucosa.
- Reducir el riesgo de padecer enfermedades del corazón,
- Contribuir al mantenimiento de la estructura y resistencia ósea.
Para preparar hummus necesitas zumo de limón, aceite de oliva, ajo y tahini, en ese orden de ideas, también te beneficias de las propiedades de estos alimentos. Por ejemplo, el limón tiene un alto contenido en vitamina C, el tahini es rico en calcio, el aceite de oliva es una grasa saludable y el ajo, consumido como condimento, es útil en alteraciones de azúcar y el colesterol, por lo que esta mezcla de ingredientes termina favoreciendo tu salud cardiovascular.
¡Ahora es momento de alistar tus utensilios de cocina y descubrir el paso a paso para hacer un hummus!
¿Cómo hacer un hummus cremoso?
Trucos para preparar hummus
La clave sobre cómo hacer un hummus consiste en preparar bien los garbanzos, para ello debes:
- Deja los garbanzos en remojo durante al menos 8 horas y después de pasado este tiempo, escúrrelos. También puedes dejarlos 24 horas y cambiar el agua cada seis horas.
- Hierve los garbanzos hasta que queden tiernos
- Cuando los garbanzos están tibios, llévalos a la licuadora junto a los ingredientes descritos en el video.
- No omitas el tahini, es un ingrediente fundamental en esta receta.
Tradicionalmente esta receta se acompaña con pan de pita, pero existen otras opciones como verduras (zanahoria, berenjenas, apio o brócoli), chips de papas, falafel, tostadas integrales o los ingredientes que prefieras.
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