Contemplar la naturaleza mientras, de manera consciente, despiertas tus sentidos beneficia tu bienestar y calidad de vida. Conoce los beneficios de conectarte con la vitamina N.
Actualmente, la mayoría de las personas lleva un ritmo de vida acelerado: contestan de manera inmediata los mensajes, no pueden pasar más de una hora sin revisar el celular, realizan múltiples tareas, entre otras situaciones que evidencian que la prisa se ha convertido en un estilo de vida, el cual, poco a poco, afecta la salud.
¿Cómo evitar el estrés que genera un ritmo de vida acelerado? Volviendo a la esencia, hay que recordar que los seres humanos durante miles de años hemos vivido en entornos naturales. No obstante, la industrialización y crecimiento de las urbes nos ha alejado de la madre tierra, aunque existan espacios verdes en las ciudades.
Por esta razón, la Fundación Colombiana del Corazón, a través de su programa: Corazones Responsables ha desarrollado un método de prevención educativa que se enfoca en diez temas culturales, entre ellos: la cultura de la vitamina N. A continuación, Juan Carlos Santacruz, director ejecutivo de la Fundación Colombiana del Corazón, nos explica en qué consiste:
¿Qué es la vitamina N?
De acuerdo con Juan Carlos Santacruz, “la vitamina N es reconectarse con escenarios naturales utilizando los sentidos de manera consciente para convertir la naturaleza en una terapia efectiva que preserve la salud, ayude a controlar enfermedades crónicas ya existentes, estimule estilos de vida menos sedentarios, promueva el consumo de alimentos naturales y permita vivir en el aquí y el ahora”.
La vitamina N es posible consumirla y tenerla todos los días, semanas y meses del año. “Lo que sucede es que la mayoría de las personas se han acostumbrado a ver y no contemplar la naturaleza. Es decir, tú puedes pasar por el parque más lindo del mundo, pero si no lo volteas a mirar, ni dinamizas tu sentidos, como escuchar la sinfonía que ofrece el entorno natural, no te va a impactar”, señala Santacruz.
Esto significa que la naturaleza tiene un poder terapéutico, siempre y cuando, la persona que se conecte con ella lo haga de manera consciente: hay que observar, escuchar y tocar no solo con las manos, también con los pies.
¿Por qué es importante la vitamina N?
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) “las enfermedades no transmisibles (ENT) matan a 41 millones de personas cada año, lo que equivale al 71% de las muertes que se producen en el mundo”. De acuerdo con Juan Carlos Santacruz, “muchas de estas patologías están asociadas a estilos de vida y herencia, además en el tiempo en el que los seres humanos se han desconectado de la naturaleza es cuando se ha presentado mayor prevalencia de enfermedad y muerte”.
Y es que como ha afirmado el escritor Richard Louv, quien investiga la relación de los niños y el mundo natural en contextos actuales e históricos “hemos cambiado de estar en una comunidad rural para pasar a una sociedad altamente urbanizada. Esto produce desórdenes fisiológicos y psicológicos”.
En ese sentido, volver a reconectarse con la naturaleza, la vitamina N, permite aliviar muchos de los síntomas derivados del estrés y prevenir enfermedades como la obesidad, la miopía, la diabetes, entre otras.
¿Cómo reconectarse con la vitamina N?
Dinamizando los sentidos. ¿Cómo se logra? De acuerdo con Santacruz, “podemos incentivar el tacto a través de nuestras manos, pies y piel al tocar el pasto, la arena o el agua. Se puede realizar earthing, que es caminar descalzo sobre la tierra, para equilibrar nuestra energía, ya que los seres humanos tenemos una carga de iones positivos, mientras que la tierra cuenta con iones negativos”.
También podemos aprovechar “que las plantas producen fitoncidas, compuestos volátiles usados en aromaterapia que generan un efecto terapéutico al oler sus hojas, raíces y tallos”.
A continuación, Juan Carlos Santa Cruz, comparte otras ideas para aprender a relacionarse con la naturaleza en el día a día:
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Consecuencias negativas de no conectarse con la naturaleza
Si eres de las personas que trabajan ocho o más horas al día, es momento de comprender que “el organismo necesita variedad, estímulo y fortaleza diaria, por eso los seres humanos debemos aceptar que el descanso no solo se obtiene los fines de semana o en las vacaciones, hay que hacerlo todos los días y uno de los elementos más significativos para descansar es conectarse con la naturaleza”, anota Juan Carlos Santacruz.
Y precisamente el no desconectarse del trabajo puede generar, a mediano y largo plazo, el síndrome de Burnout o desgaste profesional, que se manifiesta al presentar sentimientos negativos, falta de energía, dificultad para concentrarse e incluso depresión o ansiedad. Como señala Santacruz “actualmente las personas, mayoritariamente están entre los 25 a 40 años, viven cansadas, fatigadas y con estréspues les vendieron la idea que la satisfacción personal se relaciona con conseguir dinero, alcanzar determinada trayectoria profesional. Cuando lo verdaderamente importante es la salud”.
Asimismo, si se trabaja mucho tiempo sin tomar descansos, se lleva una vida sin movimiento y no se privilegia el consumo de alimentos naturales, produce que “se inflamen paredes arteriales, estómago e intestinos ocasionando patologías como el hígado graso. Pero podemos desintoxicar el cuerpo teniendo más contacto con la naturaleza”, explica Santacruz.
Para ir a la naturaleza no se necesita viajar, en Bogotá se encuentran muchos lugares verdes. De hecho, en la sede Av 68 de Compensar, está ubicado uno de los pulmones de la capital. Allí puedes encontrar espacios naturales con diversas especies de plantas y aves, o si vives más hacía el norte de la ciudad, puedes visitar la sede de la 220 o la de Cajicá, en la que encuentras hermosas zonas verdes.
Conectar con estos lugares naturales beneficia a tu calidad de vida y tu bienestar integral, por eso no esperes a sentirte cansado para dar una caminata, abrazar un árbol, comer más alimentos como frutas y verduras o tomar baños de sol. Es de esta manera como la naturaleza te cuida y le ayuda a tu cuerpo a segregar hormonas de felicidad. Recuerda que: si la naturaleza está bien, tú también lo estarás. Así que cuida a la madre tierra y contáctate diariamente con la vitamina N: la tierra, el agua, la luz y el aire para vivir en bienestar integral y con calidad de vida.
